Con tan solo 11 años, Adhara Pérez se ha convertido en todo un ejemplo a seguir, pues esta niña prodigio ya cuenta con dos carreras universitarias, todo con el fin de poder llegar a cumplir sus sueños de ser una astronauta.
A sus tres años Pérez fue diagnosticada con el síndrome de Asperger, un trastorno del espectro autista que suele ser menos grave. Las personas con esta condición frecuentemente se caracterizan por tener una inteligencia promedio o superior a la media.
Según ha relatado en medios locales, inicialmente recibió educación en casa, luego terminó la primaria a los cinco años, la secundaria a los seis y medio, mientras que el bachillerato lo cursó en poco más de un año.
Pero lo asombroso, no es solo que haya terminado sus estudios básicos de la escuela tan pronto, sino que es que además ya cuenta con dos carreras profesionales, la primera en Ingeniería industrial en sistemas y la segunda en Ingeniería en matemáticas.
Sin embargo, ahí no acabará su formación, pues está próxima a realizar su maestría en Ciencias en Ingeniería Mecánica, orientada en el desarrollo e innovación tecnológica para la solución de problemas de ingenierías de proyecto mecánico y automatización de procesos industriales.
“Mi investigación se enfocará en daños estructurales y ciencia nuclear”, contó con orgullo la joven en sus redes sociales.
Cabe resaltar que entre sus planes también está estudiar un posgrado en Astrofísica en la Universidad de Arizona, el cual sería la capacitación formal de un astronauta de la NASA, para así poder estar un paso más cerca de conseguir su sueño.
